domingo, 8 de abril de 2012

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El uso de los iPods al Viajar puede dejar secuelas en la percepción auditiva

El uso de los iPods al viajar puede causar pérdida de audición 

Los habitantes de las ciudades suelen usar el transporte público para moverse por la ciudad. El ruido del tráfico al que se exponen puede ser perjudicial y aumentar el riesgo de padecer una pérdida de audición. Por otro lado, escuchar música en los iPods o reproductores MP3 por el camino puede ser igual o más dañino para la audición.
Estudios recientes indican que se suele subir el volumen de sonido de los iPods y MP3 a niveles tan elevados que la música ahoga incluso el ruido de los trenes, autobuses y coches.
Entre los ciudadanos de Nueva York que viajan de la periferia al centro de la ciudad diariamente, uno de cada diez está expuesto a un nivel de ruido que excede el límite diario de 70 dB recomendado por la Organización Mundial de la Salud. Este es uno de los resultados de un estudio realizado por Rick Neitzel de la Universidad de Michigan, Estados Unidos.
4.500 neoyorquinos participaron en el estudio. En particular, los participantes que escuchaban música en sus MP3 y iPods eran los que corrían más riesgo de padecer una pérdida de audición. Asimismo, los resultados indicaban que los reproductores MP3 y estéreos en general eran los principales culpables de causar trastornos auditivos en los habitantes de las ciudades.

Ser consciente ayuda

Es muy importante estar atento al ruido al que se está expuesto en el lugar de trabajo durante la jornada laboral, y de acuerdo con el estudio de la Universidad de Michigan, es igual de necesario ser consciente del daño que podemos causar a nuestra capacidad auditiva durante el resto del día.
Lo que puede parecer una actividad de ocio inofensiva como utilizar iPods, reproductores MP3 y estéreos puede suponer de hecho una seria amenaza, y llegar a producir una pérdida de audición. En la mayoría de los casos, tan solo seria necesario bajar el nivel de volumen para evitar que se produzcan daños en la capacidad auditiva.
Según Rick Neitzel, no basta con prestar atención al ruido en el lugar de trabajo exclusivamente. Recomienda que como parte de los programas de salud pública se informe a los habitantes de las ciudades de los riesgos de la vida urbana, como los peligros potenciales del ruido del tráfico y de la música que se escucha mientras se viaja por la ciudad.